Belleza…es la primera palabra que se viene a la cabeza al ver esta colombiana y no se refiere a la evidencia de su arrasadora presencia. A medida que transcurre el ritmo y la maestría con la que conjuga cada verso, belleza es su show, belleza es el cambio de pista, belleza es el booth y la atmósfera que maneja a su antojo. Este despliegue de ensueño se transforma en la máxima expresión de lo sublime, será tarde cuando la conciencia reaccione y se vea atrapada en la armonía de Luff Dj.
Luisa Sanchez aka Luff es ejemplo del poder de las mujeres Dj´s en la escena colombiana. Desde pequeña mostró afinidad a las artes musicales, la electrónica llega hasta 2010 cuando inició como promotora de eventos. Innegablemente se ve cautivada por el mundo de la música electrónica y busca instrucción por su cuenta. Posteriormente y con el constante apoyo de sus amigos, consigue su primera aparición como Dj en el Mint in.
Esta multifacética artista también es profesional en administración de empresas y modelo y aunque ha podido conciliar sus ocupaciones, su reconocimiento en la escena electrónica comienza a nivel internacional. Su trayecto lista países como Panamá, el Sound:Check Xpo en México, Guatemala y Ecuador. Hoy en día su ascendencia libanesa la llama desde Dubai, siendo la ciudad que alberga con recelo su show.
La complejidad del arte, incomprendido, hermoso y a veces irreverente. Vivir de él, una difícil tarea, pero si crees, no necesitas más.
Efc
La industria electrónica nacional es exigente
Luff afirma que la industria nacional es exigente y requiere de muchos contactos, aun así, su armonía hipnotizante ha tornado todos los reflectores hacia ella, siendo host en el show de lanzamiento de Jaguar Colombia y Dj recurrente en los primeros puestos del rank DJCTOP como una de las artistas más cotizadas, ocupando el lugar que finalmente merece su talento.
Como dato curioso, el momento en el que Luff encontró la fuerza para entrar a la industria, fue al ver otra mujer Dj adueñarse del booth durante su experiencia como promotora. Quién diría que en un futuro ella ocuparía ese lugar, que el eco de su bajo electrizante cautivaría la audiencia nocturna, que ella sería la inspiración de millones de soñadoras que como ella, esperan contagiar sensaciones por medio de la música. Las mujeres que toman riesgos y se atreven a contrariar estereotipos gastados, son las que escribirán las reglas del mañana.
